Reseña: La institutriz

La institutriz es una novela de romance y ficción histórica de la autora argentina Gabriela Margall.

Principios del siglo XX, Argentina. Elizabeth Shaw, oriunda de Inglaterra, hace más de quince años que trabaja educando jovencitas de la alta sociedad en Buenos Aires. Junto con su amiga de la infancia Mary, también institutriz, hacen planes para volver a su pueblo natal Fowey. Sin embargo, la familia Hunter-Perkins requiere de sus servicios con urgencia y, por mucho que le gustaría negarse, termina aceptando el trabajo; ya que, está unida a ellos por unos fuertes lazos de lealtad y deber. En el hogar de los Hunter-Perkins se encontrará con Tomás, su amor de la juventud, dos niños que la necesitan y el misterio de su verdadero origen.

No sé por donde empezar, creo que hacía tiempo que una lectura no me emocionaba tanto.

Primero que nada, no pude evitar encariñarme con la mayoría de los personajes, son muy interesantes, entrañables y únicos, varios de ellos mujeres de gran carácter. Los terminas amando y odiando a partes iguales. Por un lado, Elizabeth tan determinada y orgullosa que a veces dan ganas de pegarle. Sus encuentros con la señora Luisa eran muchas veces tensos y emotivos. Por otro lado, Mary tan paciente y dispuesta a acompañar a su amiga. Esos capítulos de ellas dos comiendo galletitas, quejándose del té y conversando me daban la vida.

Durante la primera mitad del libro alternamos entre capítulos con cierto suspenso, entre las cuatro paredes de la sombría mansión Hunter, y otros más distendidos, por las calles de Buenos Aires y hasta con un toque cómico. Y, entonces, pasa algo que viene a remecerlo todo hacia la segunda mitad de la historia. A partir de este momento, no hay vuelta atrás, el drama y la intriga te arrastrarán como una ola salvaje.

Recomiendo tener a mano algo para anotar como para ir armando el árbol genealógico de la familia Madariaga-Perkins-Hunter, porque es fácil enredarse de repente con tanto nombre por aquí y por allá. Y créanme que hacia el final les va a servir.

En cuanto al romance, tanto Elizabeth como Tomás tienen más de 30 y ambos están pasando por una situación complicada, así que diría que es lo que menos predomina en la obra. Es mayor lo que se sugiere y lo que se va deduciendo que pasa, pero igual tienen sus momentos. ¡Y qué momentos!

Casi olvido mencionar la ambientación, 10/10 excelente servicio. Imagínense, principios del siglo XX, los primeros automóviles y cinematógrafos. Referencias a Julio Verne, Charlotte Brontë y H. G. Wells. Viajes en barco de Buenos Aires a Europa…

El final se me cayó un poco, esperaba algo diferente, y por eso le puse cuatro estrellas. Aunque ahora que pasó el tiempo y escribo esta reseña es sin duda una de mis lecturas favoritas del 2022.

Recomiendo mucho este libro si te gusta el chismecito y los secretos familiares. Es una lectura muy adictiva y ágil, que da un buen repaso a la alta sociedad de esa época.